Mirando desde afuera, lo tenía todo: una carrera que amaba, una familia solidaria, el metabolismo de Nixon pero sin las orejas de Nixon, y un salario que respaldaba mi espléndido gusto en zapatos de diseñador, vinos finos y lencería de encaje... pero no tenía con quien compartirlo.
Hasta el día en que me encontré con él: mi aventura de una noche en la universidad con la sonrisa torcida, los ojos de salgamos de aquí y una sucia, sucia boca.
Lindo y engreído, hoy Levi Brooks tiene un metro ochenta y cinco de fantasía caliente de barba.
Padre soltero sexy con hombros anchos, manos fuertes y un corazón increíblemente grande... (Quiero decir, es enorme. Y generoso. Y bombea tan fuerte... um. Lo siento. Perdí mi lugar).
Ser un buen padre lo es todo para él, pero me mantiene alejada porque cree que merezco a alguien mejor, un hombre que pueda darme más tiempo, más atención, más de sí mismo. No cree que él pueda ser suficiente.
Pero se equivoca.
Él lo es todo.
Éste y los demás aquí
No hay comentarios:
Publicar un comentario