Una dama debe sonreír siempre, estar al día de las últimas tendencias de moda y ser amable en todo momento. Además, una dama nunca debe tomar decisiones por sí misma, sino obedecer a las de su padre o su esposo. Eso es lo que lady Verity ha oído toda su vida, y lo que debe poner en práctica cuando llega a Londres dispuesta a encontrar esposo.
Con lo que ella no contaba es con una sociedad llena de hipocresía y apariencias que la sacan de quicio. Tampoco con verse atrapada entre el amor de dos hombres muy distintos…ni con que terminaría enamorándose del único que nunca podrá pertenecerle.
En un Londres lleno de peligros y secretos, Verity deberá luchar por mantener intacto su corazón….y también su vida.
¿Qué sucederá cuando una dama opte por tomar sus propias decisiones?
El destino de Charlotte Berkeley está escrito desde su nacimiento. Como hija mayor del conde de Pinecrest se espera de ella que brille en sociedad, que lleve una vida ociosa y que encuentre un buen partido. El problema es que a ella no le interesan ninguna de esas cosas y ni siquiera le preocupa que la pillen en una situación de lo más comprometida con Benjamin Thomson, duque de Bainbridge; situación que, por otra parte, ella misma se ha buscado.
Sin embargo, cuando sus actos amenazan con arruinar el futuro de su hermana, Charlotte decide dejar de lado su reticencia y acepta un compromiso con el duque: ese hombre de ojos verdes y modales taciturnos que esconde más enigmas de los que podría imaginarse… y que tiene sus propios motivos para acercarse a ella.
Entre secretos inconfesables e intrigas políticas, Charlotte y Benjamin tendrán que luchar contra la pasión que amenaza con consumirles mientras alguien, entre las sombras, parece muy interesado en la relación que se va forjando entre ellos…quizá demasiado interesado.
¿Será capaz una dama de rebelarse contra el mundo y escribir su propio destino?
No hay comentarios:
Publicar un comentario