Wealthy Richard Walker acaba de morir, dejando atrás su casa de campo llena de habitaciones repletas con los detritos de una vida. Su distanciada familia (su amargada ex esposa Caroline, su hijo adolescente con problemas, Trenton, y su hija impecable, Minna) han venido por su herencia.
Pero los Walkers no están solos.
Alicia la estirada, y Sandra la cínica, las antiguas residentes, muertas hace mucho tiempo, atadas a la casa, permanecen dentro de sus claustrofóbicas paredes. Luchando por el espacio, los recuerdos y la supremacía, observan a la familia, intercambiando insultos y recordatorios sobre sus vidas pasadas. A pesar de que sus voces no pueden ser oídas, Alicia y Sandra hablan a través de la casa - en el zumbido del radiador, un crujido en la escalera, el apagón de un foco de luz.
Los vivos y los muertos son perseguidos con verdades dolorosas que pronto saldrán a la luz con una fuerza explosiva. Cuando un nuevo fantasma aparece, y Trenton comienza a comunicarse con ella, el mundo humano y el de los espíritus colisionan con resultados catastróficos.
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