AVERTENCIA: Esta novela contiene lenguaje explícito, situaciones sexuales y es la historia de un adicto. Este material está destinado a un público más maduro. —Mi nombre es Jag Steele soy el cantante y guitarrista de la banda Pandemic Sorrow y tengo un problema de drogas. Bueno, quiero decir que no es realmente un problema… A menos que tomes en cuenta el hecho de que casi hice que mi corazón explotara por el golpe que metí en mi nariz hace unas semanas…
Esa fue mi presentación durante mi primera temporada en rehabilitación. Estoy en mal estado. Si le preguntabas a cualquiera quién soy, hay una lista que bajarán: famoso, estrella de rock, leyenda, drogadicto, mujeriego, pero si me preguntabas a mí, no tendría la primera idea de qué decir, porque no sé quién es Jag Steele. Realmente, estoy viviendo el sueño de cada otra maldita persona y lo único que quiero es la realidad.
Roxy Slade, esa chica era mi realidad. Mi brutalmente imperfecta y muy rota realidad. Y odiaba todo lo que yo representaba. Para ella yo era uno de "esos tipos" y prefiere ser enterrada viva con serpientes venenosas que darle a alguien como yo un pedazo de papel higiénico para limpiarse el culo. Brutal. La vida. Es. Brutal. Y es solo un dolor gigantesco, que es por lo cual persigo lo que sea para adormecerlo, cualquier cosa que pueda llenar este vacío. Solo quiero algo que pueda hacer que no sienta. Solo no quiero sentir.
Esa fue mi presentación durante mi primera temporada en rehabilitación. Estoy en mal estado. Si le preguntabas a cualquiera quién soy, hay una lista que bajarán: famoso, estrella de rock, leyenda, drogadicto, mujeriego, pero si me preguntabas a mí, no tendría la primera idea de qué decir, porque no sé quién es Jag Steele. Realmente, estoy viviendo el sueño de cada otra maldita persona y lo único que quiero es la realidad.
Roxy Slade, esa chica era mi realidad. Mi brutalmente imperfecta y muy rota realidad. Y odiaba todo lo que yo representaba. Para ella yo era uno de "esos tipos" y prefiere ser enterrada viva con serpientes venenosas que darle a alguien como yo un pedazo de papel higiénico para limpiarse el culo. Brutal. La vida. Es. Brutal. Y es solo un dolor gigantesco, que es por lo cual persigo lo que sea para adormecerlo, cualquier cosa que pueda llenar este vacío. Solo quiero algo que pueda hacer que no sienta. Solo no quiero sentir.
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