Caitlin Wheeler no es ajena a los secretos. Su distante padre, un infame financiero, estaba plagado de ellos, llevando una montaña de secretos a su tumba. Mientras atendía el funeral de su padre, sin saberlo se encuentra con el protegido de su padre, Neal Dietrich, un hombre apuesto, encantador y poderoso que de inmediato la cautiva.
Por años ha evitado a hombres como su padre, pero hay algo acerca de Neal que le hace anhelar una noche con él. Eso es todo.
Pero Neal quiere más y no aceptará un “no” por respuesta.
La voluntad de su padre los obliga a estar juntos y abre los ojos de Caitlin a la parte más vulnerable de la élite de Chicago. Neal promete sostenerle su mano, pero sus secretos no se encuentran seguros. Lo que se suponía sería un fin de semana lejos, se convierte en un juego del gato y el ratón lleno de lujuria, farsas y mentiras.
Por años ha evitado a hombres como su padre, pero hay algo acerca de Neal que le hace anhelar una noche con él. Eso es todo.
Pero Neal quiere más y no aceptará un “no” por respuesta.
La voluntad de su padre los obliga a estar juntos y abre los ojos de Caitlin a la parte más vulnerable de la élite de Chicago. Neal promete sostenerle su mano, pero sus secretos no se encuentran seguros. Lo que se suponía sería un fin de semana lejos, se convierte en un juego del gato y el ratón lleno de lujuria, farsas y mentiras.
Conocer al guapo protegido de su padre pone el fin de semana de Caitlin Wheeler´s en un excitante nuevo curso. Neal Dietrich es inteligente, atractivo, y todo lo que ella nunca admitiría que busca en un hombre.
Neal la quiere pero las similitudes entre él y su padre son enervantes, empezando por los esqueletos en su ropero que son más profundos de lo que ella imagina. Entre más Caitlin desentierra más claro se vuelve: ella nunca conoció a su padre y tal vez no esté lista para conocer a Neal.
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