Count On Me - Melyssa Winchester

Hay personas que te dicen que la escuela secundaria es el mejor momento de tu vida.

Mintieron.

La escuela secundaria es horrible cuando eres como yo, una autista.

Ellos piensan que porque no hablo y siempre parezco estar perdida en mi propio mundo, que soy estúpida o sorda. Algunos incluso piensan que soy retardada. No soy ninguna de esas cosas y no me gusta esa palabra.

Solo porque tengo estos problemas, no significa que es todo lo que soy.

Hay mucho más de mí, pero en realidad nadie se toma el tiempo para conocerlo. Al menos eso pensaba hasta Kayden.

Kayden Walker es malas noticias. Pasa su tiempo haciendo que las personas diferentes, al igual que yo, se sientan aún peor con ellas mismas y lo hace con una sonrisa. Es todo lo que no necesito en mi vida, sin embargo, parece que no puedo vivir sin él.

Por dentro, hay más de él, solo que tiene miedo de dejar que el resto del mundo lo vea. Lo he visto y lo estoy descubriendo, no somos tan diferentes después de todo…

Hay gente que cree que porque no seamos de la forma en que los demás se ven, somos de alguna manera más débil o menos digna de lo que

somos.

Soy la prueba viviente de que están equivocados.

Desde que tengo memoria he sido tratada de manera diferente porque soy sorda.

Lo que la gente no nota, es que el que no puedo escuchar lo que dicen, no quiere decir que no sienta el dolor que proviene de sus palabras y acciones.

Soy más que sólo una chica que no puede oír y nunca he estado más decidida a probarlo desde que termine aquí.

La Escuela Secundaria Wexfield.

Yo sé lo que pasa aquí y sé más sobre el chico que hace que todo suceda.

Dillon Murphy es problemas con una P mayúscula. Él sabe cómo hacer daño a los que percibe como más débil que él, y lo hace con una sonrisa. Lo que no sabe es que sus trucos, no funcionan conmigo porque conozco su secreto.

Estoy descubriendo que hay mucho más de Dillon que no quiere que el mundo vea y antes de que mí tiempo aquí se acabe, estoy decidida a hacerle ver, incluso si me cuesta el corazón en el proceso...

Números. Son significativos. En mi vida cada uno significa más que el anterior.

Siete años. Dos mil quinientos cincuenta y cinco días.

Ese es el tiempo que ha pasado desde que aprendí que tengo el síndrome de Asperger.

Cinco años. Mil setecientos veinte días.

El tiempo que he estado en terapia a causa de ella.

Una sala de espera al azar.

Todo lo que hizo fue poner mi mundo al revés, y me entero de que incluso en el peor ser humano, hay una historia que contar y, a veces, el inicio de esa historia puede ser engañosa.

Soy Eric Carmen. Ella es Amelia Evans y esta es nuestra historia.

La ira, el resentimiento, los celos, la rabia, la violencia, el odio y el miedo.

Durante dieciocho años, esto es todo lo que he conocido. Cuando todo parece estrellarse y arder a mi alrededor, siempre podía contar con esas siete cosas para atravesarlas.

Al menos así era antes de Isabelle.

Una breve mirada a través de una concurrida zona de estacionamiento, alteró toda mi existencia. Borrando todas las cosas con las que pensé que podía contar y sustituyéndolas por las suyas. Cosas que, incluso ahora, un año después, todavía no creo que me merezco.

El perdón, la comprensión, la aceptación, la amistad, la redención, la esperanza y el amor.

Entonces, ¿qué haces cuando te ha dado todas estas cosas, la persona más bella del planeta, sin esperar nada a cambio?

Bueno, cuando eres yo, encuentras una manera de meter la pata.

Ella cree que soy el fuerte. Que no tengo miedo de nada. Está equivocada.

Tengo miedo de muchas cosas, pero lo peor es perderla. Perder a otra persona que amo y no tener el poder para detenerlo.

No puedo perder a Belle. Simplemente no puedo. Incluso si perderla es exactamente lo que merezco.

Pensaste que nuestra historia estaba completa, pero lo que estás a punto de descubrir, no es una historia que termina realmente alguna vez. Simplemente encuentra nuevas maneras de comenzar de nuevo

Un padre condenado por conducta criminal y sentenciado a veinte años de prisión. Una madre que está tan perdida en el fondo de un frasco de píldoras, que la mayoría de los días ni siquiera estoy segura de que conoce su propio nombre. Pensarías que con modelos a seguir como esos, sabría qué evitar. Pero si sabes algo sobre mí, nada es siempre tan sencillo.

Cadence cambió todo eso. Haciéndome sentir y experimentar cosas que durante los últimos once años pensé que solo eran cuentos de hadas y sueños. Ella me devolvió mi corazón, trayendo esperanza y fe durante el viaje, hasta que todo lo que pude escuchar fue a ella. Ella se convirtió en mi mundo, un comienzo sin fin, y era tan malditamente hermoso que comencé a creer que no había nada que pudiera separarnos.

Hasta que algo, o mejor dicho, alguien lo hizo. Yo. Me han dicho que el amor no se trata de intentar, fallar y rendirse cuando las cosas se ponen difíciles. Ese amor real sigue intentándolo a pesar de ello, así que al igual que hace un año, lo volveré a hacer, y esta vez nuestro comienzo tendrá un final.

Cadence y Dillon juntos. Siempre. Estoy en la pelea de mi vida y esta vez, no planeo perder.

*Esta historia presenta a Dillon y Cadence de Hear Me Now (Count On Me # 2). El autor recomienda que para entender este, primero lea el segundo.

*Debido a la naturaleza sexual de algunas de las escenas presentes en el libro, se recomienda para mayores de 17 años.

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