Mi nuevo vecino es un completo idiota. Un imbécil alto, melancólico y tatuado. Intenté ser amable, hornear unos cupcakes para él y su adorable hija, y la única reacción que se me ocurrió tener ante su gélida recepción fue empujar esos cupcakes rosas directamente a su musculoso pecho. En mi defensa, fue una semana dura.
Volver a Seattle por primera vez en años ya era bastante duro, el hecho de estar ahí para la disposición del testamento de mi padre lo hacía aún más duro. No tenía intención de quedarme, hasta que recibí una sorpresa del tamaño de un estadio de fútbol como último regalo de mi padre.
No... de verdad. Me dejó un equipo de fútbol.
Así es como me encontré en una sala de conferencias, mirando fijamente al veterano quarterback que no quiere tener nada que ver con una nueva propietaria. ¿Y ese quarterback? Es mi vecino alto, melancólico y tatuado. Ahora está en todas partes. Al lado con su hija. En reuniones. No me hagas hablar de los partidos fuera de casa.
Luke Pierson está bajo mi piel, y muy pronto, no estoy segura de quererlo de otra manera.
El titular podría escribirse solo: Matthew Hawkins, ala defensiva estrella, sale de su retiro para jugar con los Washington Wolves.
Lo cual está perfectamente bien para Ava Baker: hace que su trabajo como publicista del equipo sea más fácil.
Solo hay dos problemas. Este jugador de fútbol en particular fue su primer enamoramiento.
El problema más grande: Matthew Hawkins una vez estuvo comprometido con su hermana mayor.
Han pasado diez años desde que Ava vio a Matthew. Él está más grande, más guapo y, lo mejor de todo, está completamente soltero. A pesar de su historia con su hermana, la atracción entre Ava y Matthew ya no es tan unilateral.
Es lo suficientemente ardiente como para incendiar toda la ciudad de Seattle.
Pero este titular es mucho más complicado de escribir. Y no sólo por la prensa o por lo que significa para su familia, porque una vez que su corazón está involucrado, no se puede predecir el final
Logan Ward no quiere más mujeres en su vida.
Ser jugador de fútbol americano y tutor legal de sus cuatro hermanas menores significa que su libro de jugadas está lleno.
Sin embargo, una de ellas acaba de aterrizar en el hospital, lo que le da a su hermano la oportunidad que necesita para desafiar a Logan por la custodia.
Su asesor legal dice que Logan solo puede hacer una cosa: buscarse una esposa.
Paige Mckinney no siempre piensa bien las cosas.
Como abandonar su carrera de modelo sin pensar en lo que podría venir después. Tampoco lo piensa cuando se proclama prometida de Logan en el hospital, simplemente porque el sexy -aunque gruñón- jugador de fútbol se olvidó el teléfono celular en una fiesta y los de seguridad no la dejan pasar. No es culpa suya que la escuchara la peor persona posible.
Llegan a un acuerdo y un matrimonio falso es la solución perfecta. Pero la sencilla solución crea un problema totalmente nuevo: no son tan diferentes como parecen.
El reacio novio tiene fuego en su interior, y su impetuosa novia está a punto de encender la cerilla.
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